Liberación

"Sábado 06 de abril de 1996

isla de margarita.

En este pequeño viaje me he sentido mejor, me gusta poder aceptar que definitivamente no eras para mi.

Que no siento odio ni resentimiento hacia ti, que por fin he logrado limpiarme. Y he decidido alejarme de ti de la mejor manera. Espero que si en algún momento vuelves a verme no sientas rencor por alejarte de mi. Ambos nos hicimos mucho daño y realmente creo que no era sano para ninguno de los dos intentar estar juntos de alguna manera.

No podíamos ser amigos, no debíamos ser amigos, habían muchas cosas que nos impedían poder serlo. Estamos predestinados a ser desconocidos que en algún momento de sus vidas tenían un lazo de amor en común.

Pero ahora sólo somos dos extraños con la misma historia, pero con un punto de vista diferente.

Es buen momento de despedirme, por primera vez siento que me hace feliz decirte adiós. Borrando todo lo malo, limpiando cada pedazo roto que dejaste, que dejamos.

Siento que las cosas tristes hay que dejarlas pasar. Y he durado tantos años para poder decir esto... Que te juro me siento en una liberación interna.

Adiós, espero tengas una buena vida, y consigas un amor que te haga feliz. Yo no pude hacerlo contigo, tu no pudiste hacerlo conmigo. Por eso debemos dejarnos pasar.

te libero con esta carta, me libero con esta carta. Dejemos que las cosas fluyan como fluye el viento, es tiempo de ser felices.

Sin más que agregar se despide el no amor de tu vida"

y así finalicé la carta, enrollé la hoja y la introduje en una botella, la tapé y la lancé al mar.

Nunca supe dónde llegó la carta, pero si supe quitarme un peso de encima.