Presionando botones de despedida

Bueno...

ha sido un día un poco largo, desabroché mi brasier y me quité los zapatos. Hoy marian está demasiado cansada y triste. Al menos quiero sentir que descalza y ensuciando mis medias puedo ser libre.

Pasé por la cocina y tomé un gran vaso con jugo de naranja , saludé a mi madre con una gran sonrisa, mi madre es la única que ha visto de mi parte una gran sonrisa, simplemente no me gusta sonreír, así que en concreto estoy fingiendo. Le di una mirada de felicidad junto a una sonrisa fingida, claramente no quiero preocuparla. No quiero preocupar a nadie... Es más efectivo esconder el dolor.

Tomé mi ipod y me coloqué mis audifonos, caminé hasta mi recámara, entré y tomé un sorbo de jugo, cerré la puerta y me acerqué a mi escritorio, levanté la tapa de la laptop y al encenderla y ver su protector de pantalla fue cómo sentir una cachetada con toda la fuerza del mundo.

No se por qué aún tengo de fondo de pantalla aquel dibujo que hiciste inspirado en mi. Me pareció el gesto más hermoso del mundo aunque dibujabas horrible. Sonreí recordando ese lindo gesto, abrí mi bandeja de correo electrónico, escribí tu correo y comencé a redactar la carta.

"viernes 28 de agosto del 2015, 1:49pm

Hola Carlos.

Habla la chica de las sonrisas incompletas, la chica que no muestra sus dientes.
Perdón por bloquearte de whatsapp.
Perdón por enviarte este correo electrónico.

Siento que me estoy obligando a hablarte.

Y de verdad este es el único método con el que me siento segura a hacerlo.

Gracias por las largas llamadas en skype, por los mensajes de texto y los constantes coqueteos por las redes sociales.

Nunca olvidaré nada de lo que me decías. Fuiste una hermosa etapa en mi vida, me enseñaste a sonreirle todas las noches a un computador.

Gracias por permitirme gustarte.

Gracias por gustarme.

Gracias por hacerme conocer el amor mediante una red social.

Recuerdo sonreír con cada tweet bonito tomándolo cómo una indirecta.

Sonreír por cada cosa que colocabas porque yo creía que era tu musa.

Me ayudaste a no ser tímida, me enseñaste a conocer a una nueva versión de mi.

No tienes ni idea de cómo me sentí el día que me dijiste que te gustaba, nunca creí gustarte.

Mi felicidad fue poder gustarte.

Odio tanto que este país sea tan grande y nos separen tantos kilómetros.

Quizás si estuviésemos cerca nuestra historia sería distinta.

O quizás sólo estoy inventando excusas para alentarme.

Creí que en serio eras diferente, creí que todo sería diferente.

Me gustabas, me gustas, me dueles, me Rompiste el corazón.

No voy a reclamarte que hayas decidido tener una novia en físico, yo sólo fui un coqueteo por una red social, por un medio de comunicación. Además ella estaba primero, para ti ella si es de carne y hueso.

Yo sólo estoy detrás de un computador... Quizás por eso ella es mejor que yo.

No quiero reclamarte ni dejar nada al azar, quiero dejar las cosas claras e irme de tu vida.

Gracias por hacerme soñar con tus labios, por hacerme sentir realmente enamorada. Juro deseaba conocerte en persona, pero es algo que definitivamente no va a ocurrir.

Quizás no estaba en el destino encontrarnos en el camino. Quizás estamos predestinados a estar separados.

Me despido de ti justo de la misma manera en que nos conocimos, frente a la pantalla de un computador. Con una media sonrisa en mi rostro, cómo en los viejos tiempos.

Sólo que esta vez con un poco de dolor escondido dentro de mi pecho.

Te di unfollow y te borré de mis redes sociales porque simplemente quiero borrarte de mi vida, no me juzgues... Todos tenemos reacciones, y la mía es tratando de sacarte de mi vida, al menos espero no verte por alguna otra parte. No quiero volver a verte, si sólo con tus fotos siento que me hago daño, de verdad me hacen mal.

Perdón por actuar de esta manera, seguramente tu también pensaste que yo era diferente.

Quizas todos somos diferentes, y por eso no debamos esperar nada de las personas.

Te agradecería que por favor no respondas este mensaje.

Me gustaría comentarte:

No quiero que seamos amigos, soy mala actriz y juro no quiero actuar a que soy amiga de alguien que jamás veré cómo amigo. Me duele pensar que soy tu amiga.

Pero no puedo obligarte a ser algo más.

Espero con ansias que seas muy feliz, te deseo que te vaya muy bien junto a ella, y que ella te dé la felicidad que yo jamás podré darte.

yo por mi parte estaré bien. Ni la tristeza ni la felicidad duran para siempre.

Se despide tu chica, la chica de las sonrisas incompletas."

Seguido de esto envié el mensaje.

Presioné el último boton de liberación que faltaba, lo eliminé de mis amigos, de mis redes sociales y envié mi despedida. Ahora sólo necesito tiempo para borrarlo de mi vida.

Ser libre

Cuando era niño algunas veces pensaba en que significaba vivir, que es ser libre? Y si ser libre y a la vez ser diferente era algo malo... A medida que fui creciendo fui comprendiendo muchas cosas.

Siempre supe que era distinto, había algo en mi diferente a los demás. Quizás una luz incomprendida o algo que me hacía diferente del resto de los niños.

He mantenido desde niño tantos cambios en mi vida, que nunca tuve un patrón de conducta, nunca fui debidamente común. Siempre hice notar mis diferencias.

No he querido parecerme a nadie, nunca me han gustado las comparaciones. Creo firmemente en que cada uno somos distintos. Nadie debe ser igual o debe ser parecido a alguien. Podemos tener cosas en común pero jamás seremos los mismos.

No hemos sentido las mismas cosas, no hemos pasado por las mismas circunstancias. Sólo tenemos algunas cosas en comun, algo parecido, un gusto similar.

Cada quien debe ser libre en cuanto a lo que quiere, lo que desea expresar, justo ser libres significa hacer lo que queremos, mostrar realmente cuales son nuestros deseos, y ¿Por qué no? demostrar tu forma de ser. Al fin y al cabo nadie viene a la vida con un manual de uso, no podemos descargar aprendizaje.

Sólo comprendiendo esto pude sentirme mejor, pude avanzar y sentir que significa poder crecer, porque simplemente en eso se basa la vida.

Las experiencias son propias y sólo podemos tomar experiencias de ellas si las vivimos nosotros mismos. La vida se basa en múltiples situaciones de aprendizaje. Sólo debemos estar atentos a cada situación.

Y estas situaciones o estas pequeñas cosas que he aprendido, son las que me han hecho saber que no conozco absolutamente nada de la vida, y sólo soy un joven inexperto que está en un constante proceso de aprendizaje,

Diferente a el proceso de los demás, pero también en aprendizaje. He comprendido que todos somos distintos y cada uno de nosotros ha marcado un cambio en cada historia, nadie pertenece a la misma o mantiene las mismas situaciones que nosotros, por eso somos diversamente distintos, y eso también nos hace libres.

Todos somos libres, todos somos difefentes.

Publicación Personal: Sentir de Despedida

Pensé tanto si debía publicar este post. Creo que nunca me cansaré de hablar de el. El mejor tío del universo, el señor que parecía sacado de una historia de fantasía, escribí este post el día de su misa del aniversario de su muerte, uno de los días más tristes en mi vida.

A continuación les dejo una gran parte de mi corazón, en este texto les desnudo al dolor más interno que llevo en mi alma.

Hoy Jueves 20 de agosto de 2015 se cumple un año de tu desaparición física tío. Ha sido un día diferente, tanto así que se ha sentido el ambiente distinto, ha sido un día lluvioso y pesado para la familia, tu ausencia se ha vuelto un saco de plomo en nuestros corazones.

Se que desde el cielo nos estás cuidando, pero lamentablemente necesito verte. Siento que tu muerte es una herida sin curar, siempre va a ser una herida sin curar. Definitivamente no me acostumbro a perderte.

Por momentos cierro mis ojos y escucho tu risa, tu voz y te siento tan cerca. Duele tanto saber que te he perdido. Perdí a alguien que amo, perdí a alguien que te amaba.

Se que vives en mi corazón, pero te quiero en físico, palpable en mi vida. Tío necesito gravemente un abrazo tuyo, ya no aguanto este sentir de despedidas.

Hoy entre toda la famila hemos decidido vestirnos de blanco, en honor a tu alma, que merece paz y que siempre fue pura.

Fuiste un padre y un tío único en nuestras vidas, eres el vacío mas grande que esta en mi vida. No hay un día en que no te piense, en el cual no me duela tu asesinato. Es tan injusto que te hayan arrancado de nuestras vidas.

Te arrancaron de una manera tan brusca y despiadada, que se hace tan difícil aceptar tu partida.

Me niego a aceptar el espacio vacío en tu mesa, el mensaje de feliz cumpleaños ausente, el abrazo del mejor tío, la sonrisa única que podía alegrar a cualquiera. Necesito de ti, de tu humor, de tu forma de ser, de tus historias.

Y creo que estas cosas las sentimos todos, nadie se acostumbra a perder a alguien de la familia, a ese vacío en las fiestas, en los corazones y en las vidas, pero de verdad no se cómo manejar esto.

Tío, perdón.

Y es que eres tan especial en mi vida.

Todo pasó tan rápido, supongo que así son las peores despedidas, aunque no pude despedirme, creo que nadie pudo despedirse...

Me duele tanto obligarme a aceptar tu partida. No quiero aceptar, no quiero creer... Quisiera que todo esto fuese una horrible pesadilla, quisiera que estuvieras aquí al despertar mañana, que todo esto fuese una gran mentira.

Se que eso no va a pasar, y debo aprender a convivir con tu ausencia, con tu inesperada partida.

No era tu momento de irte, no merecías morir así... Nadie merece morir por la delincuencia de un país.

No sabes cómo duele este sentir de despedidas.

La llamada

Sábado 15 de agosto

Estoy en la calle, junto a mis amigos y creo que es el momento de hacer la llamada. Bueno según mi teléfono celular son las 12:03AM, he estado tomando algunos tragos, no estoy ebria pero tengo el valor para decir lo que siento. Tengo mucho más valor que estando sobria.

Juro por Dios que me siento imposibilitada de callar.

Le pedí a un amigo su teléfono celular, mis amigas no querían prestarme el suyo y de verdad no quería llamar desde mi teléfono.

Marqué su número y miré fijamente la pantalla, tragué grueso y presioné para llamar, mi temblorosa mano se acercó a mi oreja derecha.

Dios mío, estoy tan nerviosa...

Escuché cómo repicaba el teléfono, no atendió y decidí intentar de nuevo. Mi corazón se iba a salir con cada repique del teléfono.

De pronto...

Atendió...

"Buenas noches"

Dios ni se que decir

"hola"

Aún no puedo hablar, no soy capaz...

"Si ni hablan voy a colgar"

Tengo que hacerlo...

Hola Andrés

Es Marian.

Te estoy llamando desde el teléfono de un amigo, no cuelgues.

Quiero que por favor me escuches y no digas ni una sola palabra.

El sólo respondió "está bien" aunque su voz sonaba totalmente extraña.

Bueno Andrés, se que esto es muy extraño, nos conocimos por una red social... Ni siquiera nos hemos visto frente a frente. Sólo por twitter, facebook, instagram y videollamadas.

Pero quiero decirte que me gustas mucho, me atrevo a decir que estoy enamorada. Se que ya lo sabes, mis indirectas hacia ti eran tan obvias en las redes sociales. Se que tu las captabas, pero ignorabas. Porque simplemente yo no te gusto.

Recuerdo ver cómo coqueteabas con otras chicas en las redes sociales. No sabes cómo me dolía no ser una de ellas. Pero es normal, no podemos gustarle a todo el mundo.

Además físicamente es imposible que yo pueda gustarle a alguien. No me gusto ni a mi misma.

Antes de que digas algo, permiteme seguir hablando, necesito soltar todas estas cosas que llevo dentro.

Me gustaría gustarte.
Me encantaría que pensaras en mi tanto cómo yo pienso en ti.
No sabes cuanto he deseado ser el motivo de tus sonrisas.
Que se te olvide la distancia, se te olvide que me ves cómo una amiga y te fijes en mi.

Pero simplemente no va a pasar.

No estamos destinados a pasar.

No puedo inyectarte amor o enviarte las flechas de cupido por correo. Simplemente no te gusto y ya.

Tu tampoco me vas a gustar para siempre.

Sólo quiero decirte que no quiero tratarte más. Me gustas tanto que me estoy haciendo daño a mi misma. Es algo que me lastima poco a poco. Y por eso prefiero despedirme.

Perdón por decirte todas estas cosas, pero definitivamente no podía callarlo más.

Te quiero mucho, más de lo que imaginas. Me encantó hablarte todos estos meses, eres increíble.

Colgué la llamada y le pedí a mi amigo que apagara su teléfono.

Yo bloquee al número de Andrés de mi celular, también de todas mis redes sociales.

Creo que esto fue un adiós inesperado, pero sentimentalmente lo necesitaba.

Nunca supe más de el.

Al menos tuve el valor de realizar la llamada.

Me voy

"Martes 2 de marzo de 2012

10:20 AM

Querido roberto, te escribe esta carta quien hasta hoy será tu esposa.

Perdón por no decirte todo esto de frente. Pero de verdad prefiero escribir esta carta e irme. No tengo el valor suficiente para decirte de frente todo lo que siento y todas las cosas que me he dado cuenta estos últimos meses.

No voy a negarte que te amo, y creo que este amor no se va a ir pronto. Es imposible que de un día para otro se desaparezca un amor tan grande. Pero algún día voy a superarte.., de verdad no se cuando, pero estoy segura de que voy a superarte.

Se que aún no cumplimos ni la mitad de promesas que nos hicimos a futuro. Se que a penas cumplimos un pequeño porcentaje de nuestros sueños. Pero sólo quedaran en eso. En sueños y promesas sin cumplir, que posiblemente en algún momento cumplamos junto a otras personas, alguien que nos ame y amemos. El amor siempre debe ser de parte y parte, deben amarse los dos.

En verdad se que no me amas, y prefiero dejarte libre. No es que me esté rindiendo a estar junto a ti, sólo quiero que estés junto a quien de verdad ames, quien mantenga viva la felicidad en tus ojos.

No sabes cuando deseo verte feliz... Pero lamentablemente yo no podré hacerlo... Yo se que no soy la mujer de tu vida, y en algún momento se que lograré comprender que tu no eras el hombre de mi vida.

No quiero obligarte a que me ames, no voy a obligarte a que me ames. Nadie debe obligar a nadie a amar a una persona, es algo que se da solo.

Pero yo si te amo, en este momento siento que te amo más que a nadie. y por tu felicidad prefiero partir. No puedo poner en tu boca amor. No puedo inyectarle a tu corazón sentimientos amorosos. Sólo puedo apartarme y dejar bonitos recuerdos de algo que simplemente no pudo ser.

Me voy con una maleta cargada de amor y sentinientos, y otra maleta cargada con mi ropa y mis cosas personales.

Encima de la cama, justo encima de la almohada está nuestro aro de matrimonio, junto al anillo de compromiso, dáselo a alguien que ames, a quien verdaderamente pueda hacerte feliz.

No intentes buscarme, tu mereces ser feliz.

Se que conociste a alguien más. Te conozco demasiado para conocer el brillo en tus ojos cada vez que lees un mensaje, cada sonrisa frente a la pantalla del computador. Hace tanto que yo no te causo esos sentimientos, que de verdad no quiero frenarte a que seas feliz.

Prefiero partir amándote en silencio. No te niego que estoy sufriendo, cómo no se sufre perdiendo a lo que se ama?, es imposible. Pero estoy segura que esto no será para siempre. Si me quedo contigo ambos seríamos infelices por siempre, yo por verte infeliz y tu por no estar con quien en verdad ames.

Se que seguramente has tenido momentos de pasión con ella, el maquillaje en tu ropa me lo ha contado. Por favor si ella puede ser el amor de tu vida, no la engañes. No sabes cuanto daño vas a hacerle al ella enterarse. Nadie merece un amor compartido.

Espero te cases con ella, o con cualquier mujer a la que ames, espero tengas hijos y quizás una mascota. Una familia que te dé absolutamente todo lo que yo no pude darte. Deseo con todas mis fuerzas seas alguien muy feliz.

Me voy siendo libre y te dejo siendo libre, a quien se ama se le deja ir, únicamente para que este alguien sea feliz junto a la persona que realmente ama.

Creo que ya te he dicho demasiado, ya he expresado un resumen de todo lo que siento, estos son mis sentimientos plasmados en palabras. Me voy pero no sin antes decirte que he decidido finalizar de buena manera nuestra relación. En la tercera gaveta de la sala, en la carpeta amarilla están los papeles de nuestro divorcio, llegaron hoy.

El abogado los trajo a penas te fuiste al trabajo, ya yo los firmé, ahora debes firmarlos tú y el abogado vendrá por ellos en unas horas. Esos papeles eran lo único que me había impedido irme antes, era un papel de liberación, lo contrario al papel de unión que firmamos hace dos años.

Somos jóvenes comprendo que la vida sigue, ambos debemos seguir adelante.

Tomé prestado algo de dinero para irme, juro pagarte cada centavo a penas pueda, alguien va a traértelo por mi.

Te envío un abrazo y un beso gigante, espero seas feliz junto al amor de tu vida.

Un beso, tu ex esposa Ana"

Firmé la carta, con mi rostro lleno de lágrimas y mi corazón destrozado con sueños rotos. Coloqué la carta en la cocina junto a las llaves de la casa, tomé mi maleta y partí de la casa que me hizo feliz por dos años de mi vida...

Desde ese momento supe que era el fin, nunca supe más de el.

Hoy desearía

Hoy desearía no estar aquí.

Sentada frente a un hombre desconocido, en una habitación fría y gris.

Con una luz fija y molesta frente a mis ojos, con un gran nudo en mi garganta y lágrimas en los ojos, me dije a mi misma que era momento de hablar...

Cerré mis ojos y dos lágrimas corrieron por mis mejillas maquilladas. Manchando mi rostro con el rimel corrido mientras mis labios color rojo carmín comenzaron a temblar...

Hoy desearía poder cambiar esta historia,

Poco a poco comencé a decir estas palabras;

Mi nombre es Maríanna

Tengo dos hijos y treinta y cinco años.

Su nombre es carlos, y ha sido mi esposo por estos últimos Diez años.

Los primeros dos años habían sido una maravilla, sentí que de verdad estaba viviendo un sueño. El definitivamente era el esposo perfecto... Fue un príncipe desde que fuimos novios, fui su reina cuando nos casamos, era demasiado bueno para ser real.

Hizo hasta lo imposible por ser buen padre, tan buen esposo, definitivamente me hizo creer que el hombre perfecto existía, y era el.

Luego de que los niños tuviesen su segundo cumpleaños todo fue cambiando. Indudablemente ya no éramos los mismos. El definitivamente no era el mismo.

Era frío, era distante. Era completamente distinto al hombre del que me enamoré. En un principio quise culpar a la monotonía... A la falta de nuevas experiencias. Me culpé a mi misma cómo mujer. Debía buscar un culpable para tan drástico cambio.

Poco a poco fueron incrementando las peleas, las malas situaciones y la falta de fogosidad sexual. Ya no había acto sexual. Habíamos muerto cómo pareja. Juro intenté hasta lo imposible por revivir esa pasión, ese fue que surgía al estar juntos. Necesitaba sentirlo.

No éramos los mismos, necesitaba que fuésemos los mismos.

....

Perdón por parar un poco, me duele tanto recordar....

Poco a poco fueron más gritos y más situaciones de estrés. Juro no saber el por qué de todo esto. Hice hasta lo imposible por hacerlo feliz.

Recuerdo que hace siete años recibí de su parte el primer golpe, busqué justificarlo, busqué quedar cómo culpable. Quise sentir que fui yo quien lo llevó a hacer eso.

Comencé a ver marcas de labial y maquillaje en su ropa. Intenté guardar el secreto y no quejarme. Sabía que eso iba a ser peor. Preferí seguir adelante y callar un sufrimiento. Mis hijos no merecían verme sintiendo tanto dolor.

Luego llegaron vicios, cada vez consumía más alcohol...Nuestros hijos comenzaron a sentir pánico hacia su propio padre. Cada vez la situación se tornaba más fuerte.

Ya ni el maquillaje podía seguir tapando mi cuerpo marcado de tanto dolor. Debajo de este maquillaje hay muchas lágrimas y secretos ocultos.

Hace poco me golpeó tan fuerte que juro deseaba estar muerta. Lloré cada fin de semana en el que el llegaba emanando su olor a alcohol. Era inevitable saber que tendría que esconder a los niños, y prepararme a sentir dolor.

Juro ya estaba harta. No soportaba ni un minuto más. No merecía soportar ni un minuto más. Al estar junto a el me sentía realmente obligada. Pagando una condena que yo no debía pagar.

No soporté más. Juro por Dios que era imposible seguir soportando.

Pensé fríamente las cosas, marqué cada paso que debía dar. Todo lo planeé en mi mente.

Así que ese viernes decidí llevar a los niños a casa de mis padres, llegué a casa e hice todo lo que normalmente hacía un viernes en la tarde... Esperarlo pacientemente mientras el llegaba a casa. Tomé su pistola de la caja fuerte, y lo esperé un par de horas frente a la puerta.

Llegó gritando e insultando como siempre. Recuerdo que al abrir la puerta y verme... Su expresión facial decía tantas cosas... En el fondo de mi ser sentía que sin importar lo que fuese, debía hacerlo. El sólo me miró y antes de mediar palabra...

lo hice...

Disparé.

Lo hice. Yo lo maté.

Cerré mis ojos sintiendo un dolor intenso en el pecho, mientras el policía bajó la luz intensa de mi rostro y me sacó de la sala.

Hoy desearía estar muerta.

Donde quiera que estés.

Es una mañana un poco fría, creo que más de lo que esperaba.
Me coloqué mi sombrero y mis lentes, era hora de entrar al tren. Es un poco complicado caminar en tacones por aquí.
Tomé mi equipaje de mano y me apresuré a entrar al vagón, que para mi suerte era el último.

inspeccioné todo el lugar con la mirada.

Por primera vez sentía que estaba en un sitio cálido pero a la vez seco y vacío. El cual me haría compañía junto a las miles de personas que abordaban este tren.

Tomé asiento en una de las mesas justo al lado de las ventanas que daban vista al paisaje, saqué una hoja y un bolígrafo y un poco desconcertada comencé a escribir esta carta.

"Sábado 8 de noviembre 1958

10:38 AM

Hola papá.

Hoy en la noche tengo mi primera función teatral. Tu niña Anastasia ya es una gran actriz. Voy en camino al sitio de la presentación.

Nunca pensé escribirte esta carta. Nunca pensé decirte alguna palabra bonita. Sabes que no eres alguien con quien haya tenido una buena relación. No tuvimos una relación "padre e hija" convencional.

Pero tener diferencias no significa que no seas una parte importante de mi vida.

Quiero empezar esta carta pidiéndote perdón.

Perdón por odiarte.
Perdón por tener asco hacia ti.
Perdón por alguna vez haber deseado que no fueses mi padre.
Perdón por tener tanto resentimiento hacia ti.

Aunque me hayas herido tanto, aunque aún tenga esas heridas sin sanar, siento que debo pedirte perdón. No importa cuan quebrada y herida me sienta por dentro. Donde quiera que estés se que vas a ayudar a curarme.

Me hiciste tanto bien y a la vez tanto daño. Se que cuando murió mamá no fue fácil para ti seguir adelante. Y mucho menos conmigo a tu cargo, yo sólo tenía 10 años, era débil y tu estabas destrozado, aún así seguimos adelante.

Siendo sinceros no fui la mejor hija, tu tampoco fuiste el mejor padre. Aún así estoy segura que tuvimos a quienes merecimos. Solamente actuamos mal de ambas partes.

No era mi culpa que mi madre hubiese muerto, no era tu culpa que yo fuese rebelde. Nunca quisiste dejarme vivir... Así cómo yo nunca quise entenderte.

Siento que tus golpes no eran la solución a mis problemas. Irme y abandonarte tampoco fue la solución para los tuyos.

Perdón por seguir mis sueños y abandonarte sin importar cuan grande era tu miedo a la soledad.

Recuerdo tantas situaciones llenas de discusiones y problemas. Recuerdo nuestra más grande pelea el día que te dije que quería ser actriz... Estabas seguro que yo no llegaría a ningún lado. Aún así saqué la fuerza que tenía mamá para seguir luchando. Y lo logré papá. En este momento desearía que estuvieses aquí para compartir mi triunfo. Poder borrar nuestro pasado y hacerte sentir orgulloso de mi.

Aunque sea por una vez en mi vida lograr ser tu orgullo.

Juro no quiero recordar más nuestras peleas. No sirve de nada recordar dolencias del pasado, enfatizar los problemas es algo que no nos permite avanzar.

Quiero que sepas que te perdono por todo lo malo que hiciste. Quiero pedirte perdón por todo lo malo que hice. No sabes cómo desearía poder volver a empezar.

Aún me duele saber que nunca pude decirte todo lo que siento de frente. Me duele tanto saber que has muerto. Te fuiste a la otra vida y yo no pude despedirme.

Es algo que no me perdonaré nunca.

Espero que donde quiera que estés, logres perdonarme. Yo debo seguir adelante, pero eso no implica que vaya a olvidarte. Siempre vivirás en mi. Siempre estarás en mi mente. Aunque siempre estaré incompleta. Al morir te llevaste una parte que siempre ignoré de mi corazón, aunque esta parte fuese la más importante.

Quiero decirte que espero alguna vez poder encontrarte. Poder tomarte de la mano y pedirte perdón, poder decirte cuanto te amo.

Espero logres haberte encontrado con mamá.

Si la ves espero le des un beso gigante de mi parte. Los extraño mucho.

Un beso y un abrazo de parte de tu niña.

Anastasia."

Luego de terminar la carta, la doblé, respiré profundo y me coloqué de pie.

Fui rápidamente al final del vagón, abrí la puerta y me sostuve con mi mano derecha de una de las barandas, miré al cielo en busca de tu mirada...

El viento está un poco fuerte

Cerré fuertemente mis ojos mientras levanté mi mano izquierda y dejé que el viento se llevase la carta.

"Perdón... Donde quiera que estés, Te amo mucho"

Publicación personal: Momento de pedir disculpas.

Viernes 07 de agosto de 2015

11:50am

Hola, se que no vas a leer estas palabras. Sinceramente no te importa... Pero creo que de todas formas debo decir todo esto que siento.

Creo que jamás te vas a dar cuenta de lo especial que eres para mi. Por fin sentí que había algo en mi vida que valía la pena, que había encontrado a alguien con quien podía conversar horas y horas sin cansarme. Que más que un amigo eras un hermano, alguien especial.

Es extraño pensar que justo sienta todas estas cosas por alguien que jamás he visto en persona. Vivimos tan lejos y por muchos momentos sentía que estábamos tan cerca.

Creo que la época también se prestó para esto. En plena era de redes sociales, videollamadas y mensajería instantanea juro que nunca sentí los miles de kilómetros que nos separaban. Eras una persona tan especial que en tan sólo unas semanas te volviste mi mejor amigo, y bueno... Sabes lo difícil que es para mi confiar en los demás.

Gracias por todo lo que vivimos, por todo lo que llegamos a compartir desde el primer momento en que nos conocimos por una red social. Eres una persona que no quiero olvidar nunca.

No sabes cómo me duele sentir que las cosas han cambiado, que posiblemente ya quieras poner un punto y final a todo. Porque de verdad quería que siguiéramos siendo los mismos. Pero no se puede cambiar el pensamiento de los demás. Creo que no podemos forzar nada, ni a nadie. Al menos espero que nunca olvides que te quiero mucho.

Gracias infinitas por entrar en mi vida, y perdón por mis errores constantes y mis molestos modos de actuar. Suelo ser estúpido, es mi naturaleza. No sabes cómo odio esta parte de mi. Perdón por incomodarte. A mi también me incomoda sentirme así. Espero si algún día lees esto, no sientas nada malo hacia mi. Eres grande... Tu sabes quien eres.

Firmo esta carta con mi nombre.

Henry Arevalo.

Camino al Hospital

Es tan confuso pensar esto. No se cómo funcionan las situaciones en la vida. Recuerdo entrar al auto, colocarme el cinturón de seguridad y tu papi comenzó a manejar, yo tomé una hoja en blanco, la coloqué encima de una carpeta y comencé a escribir esta carta:

"Martes 06 de diciembre de 1998

10:30am

Ha llegado el gran día princesa. Mi Paulita. Hoy por fin vamos a conocer tu rostro.

No sabes lo importante que fue para mi saber que estaba embarazada. Nunca pensé que ser madre sería una bendición tan grande. Yo nunca conocí a la mía.

Espero que aunque no tuve una madre, ser la mejor que tu puedas tener. Espero poder ser más que una madre, espero ser tu amiga y tu guía. No sabes cómo tu papi y yo aguardamos tu llegada.

Espero con ansias amanecer viendo tus ojos. Te amo tanto mi pequeña.

Desde el primer día en que tu papi y yo nos enteramos de tu existenca nuestra vida cambió por completo. Es increíble que el fruto de nuestro amor ya tenga un nombre. El nombre más hermoso.

Recuerdo que con tan sólo unas semanas de embarazo ya te estabas moviendo... Era una sensación tan mágica y a su vez tan extraña. Mi pequeña Paulita. Juro voy a hacer hasta lo imposible por hacerte feliz.

Tu papi y yo haremos hasta lo imposible por hacerte feliz.

No sabes cuan emocionados estamos de tenerte. Tu papi dice que serás su princesa. Eres definitivamente la reina de nuestro mundo. No sabes la bendicion que nos das con tu llegada.

Vienes a revolucionar todo. A llenar de felicidad cada espacio vacío. Gracias por permitirnos ser tus padres. Te aseguramos hacer hasta lo imposible por hacerte feliz. Eres el mejor regalo de nuestras vidas.

tengo que contarte que en mis primeros meses de embarazo recuerdo ver cómo mi cuerpo cambiaba junto con mis estados de ánimo. Todo en mi iba cambiando tanto. Juro que no me importa no tener el mismo cuerpo de antes, lo único que me importa es tenerte en mis brazos. Aún me parece mentira que vamos camino al hospital. Me siento tan feliz, por fin voy a tenerte en mis brazos.

Tu papi va lo mas rápido posible, el hospital queda un poco lejos, y de verdad no queremos esperar ni un segundo más para poder verte. Vienes a cambiar nuestras vidas para siempre. Nuestro amor siempre estará cuidándote, mi amor siempre va a estar cuidándote.

Perdón por estar asustada, tengo tanto miedo de hacer algo mal. Juro que no quiero hacerte daño. No queremos hacerte daño. Sólo queremos hacerte feliz.

Somos nuevos en esto de ser padres, es una nueva aventura, es algo que por más que queramos prepararnos sólo podremos aprender al momento.

Gracias por iluminar nuestra vida. Por permitirme ser tu casa durante estos nueve meses. Ha sido tan maravilloso ver cómo creces dentro de mi. Me alegra estar cuidándote. Prometo hacerlo hasta el fin de mis días.

Te amamos tanto mi princesa.

Finalizo esta carta con todo el amor y entusiasmo del mundo. Nos vemos pronto mi Paulita.

Atentamente tu mami Danna y tu Papi Paul."

Y así firmé la carta, le di un gran beso y sonreí con mis ojos llenos de lágrimas. Estoy tan feliz de verte.

Doblé la hoja y la coloqué en mis piernas, de pronto una luz alumbró al automóvil, levante mi rostro y mi expresión cambió totalmente, comencé a respirar muy agitada, algunas lágrimas brotaron mientras comencé a gritar.

Recuerdo los gritos de tu padre al ver al camión acercándose a toda velocidad a nosotros, fue lo más horrible que he podido vivir.

Es lo último que recuerdo. Me duele tanto no poder conocerte. Ahora tu papi y tu están en el cielo. Juro que sin ustedes no quiero seguir viviendo. No quiero estar en este maldito hospital. Postrada en una maldita cama queriendo morir para reencontrarme con ustedes. No debía sentirme así. No debía suceder así. No era cómo debía pasar. Tu y tu papi tenían que estar aquí iluminando mi mundo. Yo no debía estar viendo cómo mi vida se desmoronaba en tan sólo un segundo. Juro no quiero seguir adelante. No es lo que pensaba que iba a pasar en mi vida.

Sociedad de los sueños muertos.

Viernes 07 de Septiembre de 2012

12:03am

Es un poco tarde para estar reunidos, pero en parte pienso que es la hora correcta.

Hoy he decidido reunir a este reducido grupo de personas a este lugar, todos tenemos edades contemporáneas, historias marcadas, momentos interrumpidos y sueños incumplidos.

Curiosamente todos estamos viviendo en esta misma casa pero en habitaciones distintas. Es nuestro sitio en común.

Bueno...
Me dejaré de rodeos y los presentaré a todos.

La chica del fondo es María, tiene 17 años y su sueño es ser bailarina. Lastimosamente María sufre un raro tipo de cáncer el cual la ha dejado imposibilitada de caminar.

El chico a su lado es Manuel, tiene 18 años. Su mayor sueño ha sido ser corredor de carreras. El ha sufrido un accidente automovilístico y ha quedado inmóvil.

La chica del medio se llama Tatiana, tiene 18 años, Su mayor sueño es ser corredora de maratones. Hace unas semanas salía de su casa y fue asaltada, recibió un balazo en la espalda. Ha quedado al igual que sus tres anteriores compañeros imposibilitada de caminar.

La chica a mi lado se llama Mariana, tiene 15 años y su sueño es ser una gran actriz, es la menor del grupo, fue violada por su padre, desde entonces está desaparecida.

Y mi nombre es Eddy. Pero pueden llamarme Edd, tengo 17 años y mi mayor sueño es ser feliz.

Mi historia es un poco distinta a la de ellos, pero eso no implica que no deba estar aquí. Son sueños incumplidos, y ser feliz era el mío.

Nunca tuve un plan de vida, nunca busqué planear algo. Siempre pensé que las cosas que traía el futuro eran una sorpresa. Nunca quise entrar en un patrón de vida. Mamá decía que yo no podía ser domesticado.

Pero bueno, esta es mi historia.

Desde pequeño supe que era diferente. Nunca tuve una manera de ver la vida cómo los demás.

Aunque me gustaban los deportes, la música y la lectura... Sabía que algo en mi era diferente. O al menos sabía que eso pensarían de mi las demás personas.

Soy homosexual.

Recuerdo que de pequeño no me gustaban las niñas, ni mucho menos los niños.

lo descubrí a los 14 años, cuando comenzó a gustarme mi profesor de música. Al verlo juro que mi mundo cambiaba por completo. Sudaba como un tonto, mis manos se volvían de hielo. Nunca se lo dije a mi mamá.

Recuerdo saber que eso estaba "mal" según lo que había escuchado en la iglesia, así que decidí ocultarlo.

A los 15 años recuerdo habérselo confesado a mi único y mejor amigo. Cómo era de esperarse... El decidió apartarse y burlarse de mi.

Le dijo a todos mis compañeros del salón. Y juro nunca me había sentido tan miserable. No saben cómo deseaba morir en ese momento.

Me parece injusto que sólo por tener una tendencia sexual diferente, debas aguantar tantos maltratos. Yo estoy seguro de haber nacido así. No fue un momento fuerte en mi vida que me haya vuelto homosexual, no fue un padre ausente, no fue una madre sobreprotectora. No fue la música ni la televisión. No fue una gripe, no fue un contagio. No fueron amigos. Simplemente nací así.

Así como algunos nacen rubios, otros nacen morenos. Cómo algunos tienen lunares, otros tienen pecas. Yo simplemente nací homosexual.

Y no saben cuantas lágrimas he derramado por eso. Es tan difícil nacer distinto. Ser diferente. Tener un gusto en particular.

Recuerdo haberme cambiado de Colegio. Allí no tenía amigos. Tenía a la psicóloga del instituto. La cual tuvo la mala idea de animarme a decirle a mis padres que yo era homosexual.

Mi padre es muy machista. Militar retirado...

Mi madre es doctora. Hace algunos años no ejerce. Aún así es dueña de un hospital.

Sin más preámbulos los cité la noche del
01/07/12 a la sala de la casa, y luego de darle rodeos al asunto... Decidí decirles con el cuerpo tembloroso, lágrimas en los ojos y mi voz entrecortada

las siguientes palabras...

"Mamá... Papá... Soy homosexual"

Seguido de esto mi madre comenzó a gritar, traté de explicarles la situación pero todo salió de control. Mi madre decía que eso tenía que ser mentira. Me señalaba de pie y gritaba que eso debía ser un castigo, que ella no había perdido mis años de crianza, y entre lágrimas y gritos decía que yo no podía ser homosexual.

No escuchaba a mi padre, sólo veía a mi madre. De pronto bajé la mirada.. Y mi papá apretaba su brazo y entre un rostro de dolor y lágrimas intentaba respirar. Grité e intenté parar a mi padre del mueble. Corrí con el en mis brazos y lo introduje al carro. Mi madre condujo a toda velocidad a su hospital.

Al llegar esperamos un rato. Yo estaba muy nervioso, quería escapar y nunca haber llegado a hacer sentir esas cosas a mi papá. Mi mamá estaba en el fondo del pasillo, recuerdo que me miraba con odio. Mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

Media hora después salió el doctor de emergencias, se acercó a mi madre algo pálido. Yo corrí hacia el para saber noticias sobre papá.

El médico tragó grueso y dijo: "El señor Eduardo tuvo dos infartos, no hay nada que hacer. Lastimosamente ha muerto. "

Sentí que mi alma se había muerto con el. Mi madre cayó al suelo llorando y gritando que eso no podía ser. Había perdido a un hijo el mismo día que murió el amor de su vida. Intenté abrazarla pero no dejó que la tocara. Decía que yo era el asesino de papá.

Y la verdad lo fui.

Si yo no hubiese dicho nada. Papá no hubiese muerto.

Luego de unas horas incineraron a papá. Al llegar a casa mi madre dijo que yo debía irme. Que ella no podía convivir con el asesino de su esposo. Comenzó a llorar y se fue a la biblioteca de la casa.

Yo caminé un poco por la casa antes de ver todo por última vez, le hice una carta a mi madre expresando todo lo que sentía y lo mucho que la amo. Luego la coloqué en su cama, tomé las pijamas favoritas de papá, que aún conservaban su olor. Me las coloqué, tomé su foto, fui a mi cuarto a buscar el dije que me regaló el día de mi cumpleaños, lo coloqué en mi cuello y subí al último piso de la casa, entré a su oficina y vi que todo estaba en perfecto estado. Justo cómo el dejaba todo.

Me acerqué a su escritorio, abrí la tercera gaveta y tomé su pistola. Para mi suerte estaba cargada. Algo extraño ya que nunca acostumbraba dejarla así. Me puse de pie y respiré profundo. Cerré mis ojos y cayeron algunas lágrimas.

"Perdóname papá"

Exclamé justo antes de apretar el gatillo.

Desde allí empezó mi final.

He aquí nuestras historias, bienvenidos al cementerio. Estos sólo somos nosotros y la sociedad de los sueños muertos.

Un momento para respirar

Tomé mis exámenes médicos, mi chaqueta, tu retrato, mi bolso y mis ganas de verte. Corrí a toda velocidad y salí del departamento.

Corrí por las escaleras del fondo del edificio hasta llegar a la terraza, me puse mi chaqueta y procedí a colocar tu foto dentro de mi bolso, me lo coloqué y me paré firmemente en el borde de la terraza.

Tomé mi momento para respirar, mire al cielo y exclamé:

Hola abuelito.

Tiempo sin conversar.
He estado un poco ocupada.

Hace un poco de frío aquí.

Justo cómo cuando veníamos.

Recuerdas que de pequeña me traías aquí y jugábamos a que yo era un avioncito?

Ese es mi juego favorito.

También decías que cuando ya no estuvieras vivo sólo tenía que venir aquí y mirar al cielo.

Dijiste que tenía que venir, mirar al cielo y hablarte. Que estarías acostado en una nube esperando mis historias pacientemente, que nunca ibas a olvidarme.

Bueno me disculpo porque tenía algunos meses sin hacerlo, pero de verdad no había podido venir. Nunca has salido de mi mente.

Hoy viernes 06 de enero de 2012 se cumplen 7 largos años que no te veo abuelo. Aún parece que fue ayer el día en que mi mamá me dijo que habías viajado hasta el cielo, y que lamentablemente no regresarías.

Que habías muerto.

No sabes cuanto te extraño. Eras mi motivo de sonreír. Eras quien debía hacerme feliz y no estás.

Estos siete años sin ti han sido eternos.

Ya mañana tu niña cumpliría 17 años, y me dejaste justo antes de cumplir 10.

Te juro no ha habido cumpleaños en el que no espere tu llegada.

No tienes ni idea de cuanto necesito sentir tus abrazos, quiero que me ames y me digas que soy tu princesa.

Que no existe nieta mas bella que yo, quiero sentir tu amor.

Te necesito.

Creo que nunca te darás cuenta de lo mucho que me haces falta. De lo mucho que te necesito a mi lado.

Hoy quiero contarte algunas cosas abuelo. La primera es la que ves en mis manos, la razón de usar este raro peinado...

ves estos exámenes?

Bueno abuelito...

Camila...

Tu niña tiene cáncer.

Los médicos dicen que soy joven y puedo salvarme. Aunque mi mamá le dijo a papá que no había nada que hacer, estaba destrozada entre lágrimas.

hablando de una famosa metástasis. Pero de verdad no quiero saber de eso. Todo pasó tan pronto. Sólo se que de verdad no quiero vivir.

No sabes lo dolorosos que son estos procesos médicos abuelo. No sabes lo cansada que llego a casa. Las náuseas y todas las cosas malas que siento debido a esto. Que de verdad no quiero seguir luchando abuelito. De verdad en este momento quiero estar junto a ti. Quiero sentir amor y no dolor.

Pero primero debía venir a decirte que pronto estaré contigo. Pronto estaremos unidos.

Perdon por llorar abuelito. No sabes cómo me dije a mi misma que no debía hacerlo. Te lo juro que en mi mente me repetí a mi misma: "no llores no llores no llores NO LLORES" pero cómo era de esperarse me fallé de nuevo... Sí, abuelito... Comencé a llorar.

y es que cómo no voy a llorar si todo lo que quiero se desaparece, cómo no se llora siendo tan infeliz. Siento que llegamos al final de todo.

Se que papá, mamá y Nicolás podrán cuidarse a si mismos. Podrán encontrar la manera de ser felices sin mi. Pero de verdad yo sólo quiero estar contigo... Quiero que me salves de sentir tanto dolor. Se la cura de mis enfermedades. Se mi compañía.

Y volvemos a donde empezó todo abuelito. Quiero que me cargues cómo antes. Quiero que me hagas sentir un avioncito. Quiero que vayamos a volar.

A volar junto al hombre que más amo.

Levanté mis brazos y solté los exámenes y el viento se los llevó rápidamente.

Cerré mis ojos, y con una gran sonrisa dejé caer lentamente mi cuerpo hacia el frente, mis pies se despegaron del borde de la terraza y caí del edificio, con la esperanza de encontrarte abuelo.

Te amo.

Historia de algún lugar

Jueves 06 de enero del 2005

Según el reloj son las 10:33am...

No se si podrás entenderme, o al menos escucharme.

Pero debo decirte que te amo más que a nadie, eres el mejor padre del mundo. Nicolás y Camila dicen que eres el mejor abuelo. Hoy no querían ir a clases sólo para acompañarte. Querían pasar un tiempo con el mejor abuelo del mundo. El más consentidor hacia sus niños, el que siempre tiene una sonrisa.

Ahora voy a hablarte cómo hija papi, se que definitivamente no he sido la mejor. Pero te he amado más que a nadie en el mundo. Eres lo más hermoso que me ha podido pasar. El mejor padre que la vida me pudo dar. No sabes lo mucho que te amo y lo mucho que te necesito.

Recuerdo cuando me llevabas al colegio y te reías por mis berrinches para no estudiar. Y me dabas una gran sonrisa y me decías que allí me tenía que quedar

También recuerdo aquel ramo de rosas que me llevaste a mi habitación el día que cumplí 15 años;
"mi niña ya es una mujer, aquí estan tus rosas.... Blancas como te gustan mi princesa" nunca voy a olvidar eso.

Fuiste el hombre más hermoso del mundo.
Eres el hombre más hermoso del mundo.
Gracias por haberme llevado al altar, por tomarme de la mano y aunque tenías pulso tembloroso decías que yo debía estar tranquila.
Curiosamente quien estaba nervioso eras tú.
Recuerdo cuando iba a nacer Nicolás, estabas tan nervioso que los médicos decían que casi parecías su papá.

Cuando iba a nacer Camila parecía que te ibas a desmayar. En el mundo no había un hombre más feliz en ese momento que tú.

Recuerdo cada palabra tuya papá
cada "todo va a estar bien"
Cada vez que decías que yo era tu niña.

Perdón por no saber el valor de cada beso.
El valor de cada sonrisa
El valor de cada gesto.

Sólo se que cada cosa que hacías, cada abrazo era cómo estar en el cielo.
Te amo tanto papá.

Perdón por no haber sido la hija perfecta que merecías. Y gracias porque aunque no fui la hija perfecta, me amaste cómo nadie lo hará nunca.

Gracias, te voy a extrañar mucho.

Luego de esto abracé a mi padre, me levanté y aunque con voz temblorosa y lágrimas en los ojos, pude acercarme al médico y decirle: listo doctor, puede apagar las máquinas.

Seguido de esto el doctor apagó una a una las máquinas, y junto con ellas apagó la mayor parte de mi vida.

Padre cómo me duele aceptar que has muerto.

Liberación

"Sábado 06 de abril de 1996

isla de margarita.

En este pequeño viaje me he sentido mejor, me gusta poder aceptar que definitivamente no eras para mi.

Que no siento odio ni resentimiento hacia ti, que por fin he logrado limpiarme. Y he decidido alejarme de ti de la mejor manera. Espero que si en algún momento vuelves a verme no sientas rencor por alejarte de mi. Ambos nos hicimos mucho daño y realmente creo que no era sano para ninguno de los dos intentar estar juntos de alguna manera.

No podíamos ser amigos, no debíamos ser amigos, habían muchas cosas que nos impedían poder serlo. Estamos predestinados a ser desconocidos que en algún momento de sus vidas tenían un lazo de amor en común.

Pero ahora sólo somos dos extraños con la misma historia, pero con un punto de vista diferente.

Es buen momento de despedirme, por primera vez siento que me hace feliz decirte adiós. Borrando todo lo malo, limpiando cada pedazo roto que dejaste, que dejamos.

Siento que las cosas tristes hay que dejarlas pasar. Y he durado tantos años para poder decir esto... Que te juro me siento en una liberación interna.

Adiós, espero tengas una buena vida, y consigas un amor que te haga feliz. Yo no pude hacerlo contigo, tu no pudiste hacerlo conmigo. Por eso debemos dejarnos pasar.

te libero con esta carta, me libero con esta carta. Dejemos que las cosas fluyan como fluye el viento, es tiempo de ser felices.

Sin más que agregar se despide el no amor de tu vida"

y así finalicé la carta, enrollé la hoja y la introduje en una botella, la tapé y la lancé al mar.

Nunca supe dónde llegó la carta, pero si supe quitarme un peso de encima.

Publicación personal: Cartas al mejor Tio del mundo.

Esta es definitivamente mi publicación más personal.

ciertamente es la que más me afecta y la que más errores gramaticales tiene, aún así las publico. Son cartas que le hice al mejor tío del universo. A uno de los hombres que más he amado en mi vida. Lamentablemente asesinado por la delincuencia venezolana el 19 de agosto de 2014 frente a la clínica canaval en barquisimeto. Sin más que decir les dejo estas sentidas cartas. ¡Buenas noches!

06 de septiempre del 2014

2:49 am

Rápidamente dentro de dos dias se hacen dos semanas de que nos dejaste Frank Enrique Palencia Mayurel o mejor dicho,  te arrebataron de nosotros. No querias irte, no queriamos que te fueras. Cada instante contigo lo repetiriamos mil veces. Tu compañia era tan grata, tan feliz. Tan sencilla como compleja. Siempre estabas ahi para darnos consejos,  para ayudarnos en todo. Siempre fuiste un padre excelente,  un amigo ejemplar y un tio incomparable. No sabes cuanto te extraño y me duele tu partida, me duele más pensar que hubieses podido quedarte. Si no hubieses sido victima de esta sucia delincuencia que invadió a nuestro pais. Siento tanto odio por ese mal hombre que te quitó la vida, tanta rabia, tanta impotencia, tantos nudos en mi garganta que no me permiten ni gritar, No quiero llorar, quiero ser fuerte y darle fuerzas a toda la familia,  pero no puedo. Simplemente me miento a mi mismo y lloro a escondidas. Se que no es lo que nos enseñaste, nos enseñaste a demostrar lo que sentiamos, a no sentir odio, a amar a la familia, a ser de buen corazón.  Perdoname por no haber sido el mejor sobrino, por no visitarte tanto como habrias querido, por nunca darte las gracias por ser como un segundo padre. Extraño que chateemos por pin, que te metas conmigo. Que me des la bendicion. No sabes cuanto te extraño tio. Te amo tanto. Solo le pido a Dios que nos envie la sabiduria y la fuerza necesaria para seguir adelante. Tío dale fuerzas a mis primas, a mi primo, y a mi tía, asi como yo estoy mal, ellas estan peor. Te pido tio nunca me olvides allá en el cielo. Que Dios te tenga en su santa gloria. Descansa en paz. Yo jamás voy a olvidarte. Es imposible olvidarte. Te amare siempre, atentamente: tu sobrino al que siempre apoyaste.

24 de septiembre del 2014

4:08AM

Ya este 19 se cumplió un mes de tu pérdida física Tio. Digo 19 porque fue el momento en el que estuviste en ese mal lugar, el lugar en el que deberían de salvarse vidas, se perdió una. Asi es Tio.  Ha pasado un mes tan rápido,  hace un mes que te fuiste. Frank Enrique Palencia Mayurel aún no hay palabras para describir todo lo que tu familia sentimos. Es duro saber que ya no estás cuando voy a tu casa. Nada me dolió más que ver tus cosas, tu foto al entrar a tu casa, entrar a tu cuarto y no verte viendo television. Cada día se hace mas dura tu ausencia,  y mas dificil aceptar tu partida. Pensé que el tiempo nos ayudaría a vivir con esto, pero no fue así.  Me cuesta tanto pensar como alguien puede vivir tranquilo, sonreir, compartir con su familia, luego de haber destruido otra. Como puede haber alguien tan sangre fría para asesinar a alguien solo por unos estúpidos articulos materiales. Perdoname por sentir rencor Tio.  No es lo que tu quisieras. Pero tengo rencor porque te apartaron de mi lado, sin poder despedirme de ti. Creo que jamás queremos despedirnos de quienes amamos. Aún así dolorosamente debemos hacerlo. Jamás vamos a olvidarte, se que lo he dicho muchas veces. Pero no me cansaré de decirlo. Siempre estarás en mi mente y en mi corazón.  Danos fuerza a tu familia, y cuidanos siempre como lo hiciste en físico.  Ahora espiritualmente. Espero en este mes hayas disfrutado de tu compañía Junto a Dios, que lo hayas hecho reir como nos hiciste reir a nosotros. Me gustaría contarte tantas cosas Tio.  Espero poder volver a verte algún día y darte un gran abrazo. No olvides que te amo, y eres el mejor tío posible. Gracias por siempre haber estado ahí.  Descansa en paz Tio.  Nunca me cansare de decir cuanto te amo.

13 de octubre del 2014

2:50 AM

Frank Enrique Palencia Mayurel tío te necesito, me hacen falta tus palabras de aliento, tu apoyo, siempre fuiste el mejor de mis tíos, el único que nunca me dijo que no. Me duele tanto saber que no éstas aquí. Necesito que me ayudes hoy mas que nunca. Me siento tan solo. Tan vacio
Nadie da unas palabras de aliento como tú. Porque tenía que llegar un malnacido a apartarte de mi. Tu me apoyaste mas que mi propio padre. Me dejas un vacío tan grande. Te necesito tanto tío. Solo quisiera tener un abrazo tuyo, unas buenas palabras, te quiero aquí. Te necesito. Este dolor se hace cada día mas grande. Te juro de haber sabido que ya no estarías junto a mi, te habría dicho que fuiste el mejor, siempre serás el mejor y que te amo demasiado tío, el segundo padre que la vida me dio, se que ahora eres un ángel. Pero yo te quiero ver, necesito verte, tocarte y abrazarte tío. Me haces me haces muchisima falta.

19 de Junio del 2015

2:29AM

ya casi llegamos a un año. Hace casi un año de uno de los peores días de mi vida. Nada más triste para mi que tener que decirte adiós sin poder despedirme y darte un último abrazo. Me gustaría poder haberlo hecho, poder decirte lo importante que eres y seguirás siendo para mi. No sabes cuanto te necesito, desde que te fuiste supe qué es ese vacío en el pecho. Es algo que jamás se deja de sentir. Te extraño mucho tío. Frank Enrique Palencia Mayurel no te imaginas cuanto. Me prometí a mi mismo no volver a publicar todo lo que sentía. Pero te juro que hoy es necesario. Necesito un abrazo. Un chiste por pin, que te metas conmigo. Te necesito tanto tío. Me cuesta aceptar aún que jamás voy a volver a verte. Perdón por no ser tu mejor sobrino. Perdon por no estar mas tiempo junto a ti. Siempre voy a amarte y vas a ser mi tío favorito. Ojalá pudieras venir a abrazarme. No sabes cómo te necesito. Extraño tus chistes,  tu forma de ser, tus cuentos de cuando eras chamo, tus famosos converse blancos, cómo mama Enma te engrodó con avena. Extraño cada detalle de ti. Siempre fuiste el mejor.

Explicaciones

Con voz temblorosa me paré frente a ti, aunque imposibilitado de poder ver tu reacción al escucharme, comencé a leer esta carta llena de explicaciones.

"Primero que todo déjame disculparme.
creo que es muy tarde para venir a molestar, incluso es demasiado tarde para venir a hablarte. Pero también déjame tomar cómo excusa lo tontos e inmaduros que somos los jóvenes.

Te juro que tus besos son únicos e irrepetibles en el mundo. Nadie nunca va a hacerme sentir cómo lo hiciste tu. Fuiste mi acto de magia favorito. Magia porque me hiciste sentir una ilusión.

Fuiste tantas cosas en tan poco tiempo. Que aún siento que es mentira que no estás aqui. Juro que de haber sabido que esto pasaría...

Jamás me hubiese permitido que entrases en el maldito auto. Y mucho menos sin decirte cuanto te amo y cuanto te necesito a mi lado. O al menos irme en ese auto contigo. Han pasado tantos años y aún no dejo de pensar en ti...

Hay algunas noches en las que siento que me abrazas, pero despierto y veo que no estás aquí.

Es duro despedirse de alguien del cual no te quieres despedir. Porque sabes que ese alguien no se quería ir. Pero se fue.

Te fuiste. Y me duele tanto decirlo... Pero me toca aceptar esta despedida, y lamentablemente seguir adelante.

Perdóname por nuestra última pelea, perdóname por no despedirme. Perdóname por todo lo que he hecho. Juro jamás volver a molestarte.

Eres el amor de mi vida"

y así, con lágrimas en los ojos; doblé la carta, y junto con una rosa roja la puse frente a tu foto, justo delante de tu lápida.

No sabes cómo odio estar en los cementerios. Más aún desde que tu vives aquí. Espero poder tener la fuerza para poder seguir adelante. De igual manera te extraño mucho.

Carta escondida

"1 de agosto del 2003

Día 169

1:30 am

Hola, es raro hablarte después de tantos meses. Recuerdo que te despediste justo el día de san valentín
También recuerdo que dijiste que ibas justo a ver a quien amabas realmente. Y se que no te referías a mi.
Después de eso decidiste marcharte. Te llevaste mi sonrisa, pero ahora ya no la quiero de vuelta. Sin ti no la necesito.
recuerdo también que mis amigos dijeron que volverías pronto. Alimentaron mis esperanzas pero no tenían razón.

No volviste, no querías regresar. Me duele mucho decir esto, pero no quiero hacerte sentir mal. Con que yo sufra por los dos es suficiente. he llorado tanto que siento que voy a deshidratarme.

Pero tranquilo, a mi llorar me alimenta.
es algo que siempre ocurre, no estoy acostumbrado a ser feliz.

Con estas confesiones no quiero que creas que deseo borrarte de mi vida.

Es imposible borrarte de mi vida.
Sólo quiero que sepas lo que siento en este momento.

Debo confesarte también que en esa mesita de vidrio está tu carta. Intacta, igual a cuando me la diste. tiene algunas lágrimas pero no afecta en nada a su contenido. es sólo que a veces tiendo llorar al leerla, pero no es nada, realmente es una costumbre.

La verdad ya te he confesado tanto que no sé que más puedo decirte. Creo que ya es momento de despedirme... Y
bueno, se que esto es el final. Por mi parte me quedo con mis tonterías. Por tu parte te quedas con tu complejo de estrella fugaz. estrella fugaz porque iluminaste mi vida por un ratico, las mejores cosas son pasajeras. por eso lo nuestro fue pasajero.

Al final de todo tu seguirás esperando a que nos tomemos un café amistoso, yo seguiré esperando a que nos demos un beso de despedida.

Perdón si me quedo sin palabras.

El sentimiento a veces me impide hablar."

Y así me acerque a la ventana lentamente, suspirando levanté la hoja de papel hacia adelante y dije:

"Bueno, suficientes verdades escritas, es hora de quemar esta carta"

después encendí un yesquero y la carta comenzó a quemarse en obras de segundos.

Porque hay cosas que sólo deben quedar en mi mente, cosas que no mereces saber.